viernes, 24 de enero de 2014

Emptyness

Me rendí, y dejé un enorme vacío que aunque lo intento no se llena con nada. No tengo hambre, no tengo ganas ni de llorar, tan solo tengo ese espacio que me quema por dentro. Y me quemo, me disuelvo lentamente como un último cigarrillo, me pregunto qué he hecho mal pero lo he hecho todo, y ahora sí lloro, porque sé que nada volverá a ser igual, y ahora sí lloro porque si volviese al principio de todo y pudiese cambiar el futuro desearía no conocerte, o quizás sí, quizás no cometería los errores que cometí, o quizás los volvería a cometer, fue bonito, quizás lo querría volver a vivir, volver a sentir, aunque al final duela. Resignación, tan solo eso, tan solo debo resignarme y eso hago. Me resigno y sigo con mi vida, aunque duela, aunque cueste, no era la primera vez ni supongo que la última, me resigno y lo acepto, como tiene que ser.
Ayer me sentía tan jodidamente mal que no pude hacer nada, no pude tener despecho ni utilizar a una persona para reemplazar a otra, porque si hiciese eso, me quedaría sin nada y con el mismo vacío al que le tengo miedo, el mismo vacío que sentí una vez y pensé no volver a sentir, ese vacío que me costó tanto tiempo llenar y que vuelve a recordarme lo mal que lo pasé aquella vez. Quiero un fin, quiero algo que lo llene, pero, de verdad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario